Todo empezó hace unos años cuando nos conocimos por casualidad, o mejor dicho por destino. Porque como dice el popular refrán: “Cuando toca, ni aunque te quites y cuando no te toca, ni aunque te pongas”.

Tras un par de conversaciones decidimos hacer nuestra primera salida. Victor nunca había probado la comida Hondureña de la que tanto hablaba Elea, y ella conocía el lugar perfecto adonde podían ir a comer. La comida y la cocina es algo que nos ha unido siempre, y desde entonces somos inseparables. 

Entre otras cosas nos gusta mucho hacernos reír con nuestras tonterías. Disfrutamos de las pequeñas cosas, como ver pelis y series o estar en casa con nuestros gatos. Aunque también variamos nuestros días cuando vamos a comer a sitios, a pasear o a tomar el vermut.

A los dos nos encanta viajar, por eso cuando podemos nos escapamos y damos vueltas por el mundo.